¿Eres el dueño de tu vida o el administrador de la misma?
Cuando tengo oportunidad de dialogar con jóvenes el tema obligado es la profesión y mi pregunta es: ¿qué relación tiene la profesión con tu vida?
¿A caso sientes que eres el dueño de tu vida o el administrador de la misma?
Administrar no es fácil, máxime cuando el contenido de la administración es tu propia vida o la de tu familia.
La iglesia, cuya tarea es revelarnos la vida de Jesús, nos hace verdaderos signos: que están íntimamente relacionados a la administración de la vida, a saber:
LA TÚNICA ( ropón que representa la pureza de vida, Isaías 1:16; 48-10) la amistad que el Señor nos ofrece y que debemos acrecentar día a día.
LA LUZ ( cirio, vela) como signo de vida que como misioneros debemos llevar a nuestros ambientes de familia y sociedad
¿Hace tanta falta la luz del Espíritu en nuestras vidas? El Señor en su Evangelio de un modo franco nos dice: “Yo soy la luz del mundo, el que me siga no andará en tinieblas (Mt 5:14).
Esta tarea no es fácil, con nuestras propias fuerzas; no podemos cumplir. Pero el Señor nos dice: “No tengas miedo, yo estoy contigo” (Mt 14,31 10:30).
Estrecha tu amistad con Él…. métete en su misma frecuencia y deja que su Espíritu llene tu vida…. Y te darás cuenta que es posible y que esta puede ser la experiencia más hermosa de tu vida.
Dios, como nos ha enseñado a su Hijo, es la prioridad de vida. Él es el dueño de nuestra vida y de nuestra familia, por lo tanto hay que estar en comunión con Él para captar lo que Él quiere de nosotros.
Con el fin de que esta reflexión llene a tu vida como discípulo de Jesús, te comparto alguna interrogante, esperando que te ayuden a tomar conciencia de tu papel de administrador de tu vida.
– ¿Estás convencido de que Dios es el dueño de tu vida y que tú solo eres el administrador de la misma?
– ¿Estás ubicado como persona sabiendo de dónde vienes y a dónde vas y de tu importante rol de familia?
– ¿Dios es una realidad de familia para ti, la cual la tomas en serio o como el niño o el joven que chantajeas a sus padres?
– ¿Tu prioridad es la familia o sólo te vales de ella para pernotar, alimentarte y lograr tus metas?
– No dudo que la tecnología es un medio actual de comunicación y de prosperidad, pero la usas como medio o como fin y descuidas tus obligaciones.
¡Ojalá que ahora que gozas de salud y de vida puedas enmendar lo que no va de acuerdo a la administración de tu vida y de corazón te deseo crezcas en virtud y en amor al estilo de Jesús!
Pbro. José Medina Montoya
Casa San José